Los objetivos SMART configuran una metodología basada en la formulación de objetivos iniciales específicos, medibles, alcanzables, relevantes y basados en el tiempo.
Con ellos, logras disminuir la incertidumbre, haciendo que el desempeño de tus equipos aumente y refuercen su compromiso con tu empresa.
Aplicados específicamente al campo del reclutamiento te ayudan al ahorro en costes y al aumento de la tasa de éxito en la captación del talento.
Por su gran relevancia, vamos a hablarte de qué son exactamente, cómo implementarlos en tu empresa y para qué te pueden servir.
¿Qué son los objetivos SMART?
Los objetivos SMART son herramientas de coordinación de proyectos eficientes que se integran en una metodología que define los objetivos, los roles de los intervinientes y el plazo de consecución de manera precisa e inequívoca.
De esta manera, permiten el seguimiento y la realización de acciones adaptadas para conseguirlos. Este planteamiento perfecciona la gestión de tus proyectos incrementando su tasa de éxito.
Estos objetivos pueden aplicarse a cualquier ámbito de tu empresa y al integrarlos en tu estrategia de selección de personal te ofrecen ventajas como el ahorro en costes, la mejora de la planificación y de la verificación de los logros del proceso de selección, etc.
En definitiva, te ayuda a aumentar el desempeño de tu departamento de Recursos Humanos (RR. HH. ).
SMART es un acrónimo de los 5 requisitos de los que te hablamos seguidamente.
Específico (del inglés specific)
Un objetivo SMART debe ser preciso y comprensible de tal manera que cualquier persona que lea el planteamiento entienda claramente de qué se trata, qué medios van a emplearse, cuál va a ser el procedimiento, en qué plazo va a lograrse y cómo se va medir ese éxito.
Para conseguirlo plantéate qué deseas lograr con este objetivo, dónde vas a aplicarlo o quién será el responsable de alcanzarlo.
Medible (del inglés Measurable)
Tu objetivo debe poder cuantificarse ya sea a través de una cantidad, una calidad, una frecuencia, un coste… Gracias a este rasgo puedes medir el progreso y saber cuándo lo has conseguido.
Alcanzable (del inglés achievable)
Uno de los errores más comunes que llevan al fracaso de una estrategia es el de plantear objetivos demasiado ambiciosos e inalcanzables. De modo que antes de plantear el tuyo, toma en consideración la capacidad de tus empleados y los medios de que disponen.
Responde a preguntas del tipo: ¿cómo se puede alcanzar esta meta? o calcula las posibilidades que existen para que puedas lograrla.
Tus objetivos deben adaptarse a la situación real de tu empresa.
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Relevante y realista (del inglés realistic)
Para que un objetivo sea relevante debes cuestionarte sobre si se trata de un beneficio estratégico, a quién beneficia, si es buen momento para plantearlo o si el responsable designado es el correcto para llevarlo a término.
Basado en una duración temporal (del inglés Time-bound)
Marcar una fecha para la consecución de tu objetivo es una condición ineludible. Pautar las fases de la hoja de ruta te permite minimizar las posibles urgencias y aprovechar mejor las acciones.
De modo que pon una fecha límite a tu objetivo, marca los pasos a seguir hasta lograrlo y elimina la incertidumbre. Esto genera un mayor compromiso en los equipos implicados.
Objetivos SMART: ejemplo práctico
Imagina que deseas aplicar los objetivos SMART al proceso de selección de personal.
Podrías querer plantearte como objetivo reducir el tiempo empleado para la captación de talento.
Si lo traduces a las características de un objetivo SMART quedaría como sigue:
- Específico. Reducir el tiempo dedicado al reclutamiento a través de la automatización de parte del proceso gracias a un software especializado en RR. HH.
- Medible. Disminuir el tiempo en un 50 %.
- Alcanzable. Para lograr esta meta la empresa debe invertir en un software de RR. HH. y formar al equipo en su uso.
- Relevante. Gracias a esta reducción de tiempo, el departamento de RR. HH puede centrarse en mejorar la employee experience y la marca de empleador.
- Basado en una duración temporal. El plazo para conseguirlo es de 6 meses.
Algo muy importante para el éxito del proyecto es conocer perfectamente las necesidades de tu empresa. Para ello, es importante contar con parámetros de gestión previos como los indicadores de reclutamiento, en este ejemplo en concreto.
¿Cómo poner en marcha la metodología SMART?
A pesar de todo lo que acabamos de ver, para que tus objetivos sean exitosos deben seguir una metodología, una planificación.
Planteamiento
El primer paso es realizar una evaluación general de la empresa para identificar los objetivos que deseas alcanzar, así como los responsables implicados para su cumplimiento.
Implantación
La siguiente fase es la programación de los objetivos y el desarrollo de espacios que permitan el diálogo y la reflexión de sus responsables.
En esta fase pueden detectarse errores en el planteamiento, por lo que se trabajará en solucionarlos de manera proactiva.
Definición de indicadores
Es imprescindible definir indicadores apropiados para el seguimiento de cada objetivo y hacerlos accesibles a todos los integrantes del proyecto.
Duración
Establecer un límite en la implantación de la metodología SMART resulta un elemento estratégico que afecta a la operativa. Su duración depende de la complejidad del proyecto.
¿Para qué crear objetivos SMART en una empresa?
La finalidad de crear objetivos SMART en una empresa se centra 3 grandes objetivos:
- Conectar el qué con el cómo, esto es plantear estrategias de manera práctica enfocadas a conseguir el objetivo.
- Potenciar la eficacia de tus equipos.
- Cultivar la responsabilidad de las personas encargadas de desarrollar el proyecto y promover que cultiven iniciativas enfocadas a la consecución de las metas planteadas.
Gracias a los objetivos SMART desarrollarás estrategias orientadas a resultados y gestionadas a través de indicadores inteligentes que permiten constatar la evolución de cada proyecto en todo momento.
Es una manera de apostar por la transparencia y de disminuir la procrastinación por falta de organización.
El resultado es un aumento de la calidad en los resultados gracias a una coordinación rigurosa a la hora de asumir responsabilidades alineando perfectamente el planteamiento y su desarrollo con los objetivos.
Sin duda el rasgo diferenciador de los objetivos SMART es la claridad: claridad en la comunicación, en el desarrollo del proyecto, en los roles asumidos y en las conclusiones.
Y claridad y seguridad es lo que te ofrecemos en Smowltech con nuestros productos de proctoring. Solicita tu demo gratuita para que podamos explicarte todo lo que le podemos ofrecer a tu proyecto.
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