El reclutamiento interno es una estrategia que permite a las empresas aprovechar al máximo su talento interno y reducir los costos de contratación.
En el mercado laboral actual, donde las empresas son conscientes de la necesidad de introducir a sus equipos en una dinámica de mejora continua y hay multiples tipos de contratación, como la contratación lateral, el reclutamiento interno se ha convertido en un pilar fundamental para cubrir vacantes de manera efectiva.
También resulta ser un recurso esencial para mejorar la satisfacción de los empleados, incrementar su productividad y consolidar su compromiso a largo plazo.
Por ello, en este artículo te invitamos a conocer en profundidad las ventajas y beneficios del reclutamiento interno para que puedas sacarle el máximo partido.
¿Qué es el reclutamiento interno?
El reclutamiento interno es el proceso mediante el cual las vacantes laborales dentro de una empresa se cubren con talento existente, es decir, no se reclutan nuevos perfiles aumentando la plantilla, sino que se promueve a los empleados actuales.
Este método aprovecha el conocimiento existente en la empresa, rentabiliza los planes de formación y fomenta el crecimiento profesional que fideliza a los empleados.
De esta forma, los empleados aumentan su compromiso al ver que pueden optar por oportunidades internas de movilidad lateral, promociones jerárquicas o participar en proyectos desafiantes que los hagan evolucionar profesionalmente.
Tipos y ejemplos de fuentes internas de reclutamiento
El reclutamiento interno puede provenir de 3 fuentes principales dentro de la empresa:
1. Promociones jerárquicas
Este es un desarrollo profesional vertical dentro de la empresa, donde un empleado es promovido a un puesto con mayor responsabilidad y jerarquía.
Este tipo de reclutamiento interno fomenta la lealtad y el compromiso del empleado, aprovechando el conocimiento adquirido durante su desempeño en la organización.
Un ejemplo de esto sería cómo un asistente de RR. HH. es promovido a gerente de RR. HH. tras liderar con éxito iniciativas de inclusión en la empresa.

2. Transferencias horizontales
En este caso, el movimiento de talento es transversal en lugar de vertical. Es decir, la persona permanecerá en el mismo nivel jerárquico, pero con responsabilidades diferentes.
Esto le permite ganar experiencia en diferentes áreas y aumentar su empleabilidad al adquirir nuevas habilidades.
Es una promoción que ofrece una solución rápida a una necesidad urgente y favorece la retención del talento al permitir que los empleados enfrenten nuevos desafíos.
Para ilustrar este escenario, piensa en un gerente de atención al cliente que es transferido al departamento de desarrollo de productos para mejorar la experiencia del usuario, aportando su conocimiento sobre las necesidades y sugerencias de los clientes.
3. Programas de desarrollo profesional
En esta modalidad, el reclutamiento interno se realiza a través de una formación estratégica proactiva que mejora la calidad del talento de una empresa mediante capacitación, evaluación del desempeño y mentorías.
Es el caso de una secretaria administrativa que participa en un programa interno de liderazgo para convertirse en secretaria ejecutiva.
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Ventajas y beneficios del reclutamiento interno
El reclutamiento interno proporciona una serie de beneficios que pueden ser estratégicos para tu proyecto, como los siguientes:
Ahorro de recursos
Utilizar talento interno reduce el coste por contratación y el tiempo de reclutamiento, ya que prácticamente no requiere inversión en procesos de selección y permite mejorar la plantilla sin aumentar el personal.
En la misma línea, ahorrarás tiempo, especialmente si has implementado programas de evaluación continua que faciliten la retención de talento interno segmentado y actualizado.
Optimización de la productividad
Dado que la nueva vacante será ocupada por un empleado familiarizado con la cultura organizacional y los procesos de la empresa, no será necesario pasar por todo el proceso de onboarding. Además, se reforzará la cultura de la empresa.
Por otro lado, la empresa ya conoce el modo de trabajo del empleado, lo que reducirá la curva de aprendizaje en sus nuevas responsabilidades al poder ajustar su proceso de formación de manera más precisa.
Incremento del compromiso
Cuando los empleados se sienten valorados y ven que pueden crecer dentro de la organización, fortalecen su apego y se mantienen motivados.
Ten en cuenta que el compromiso está estrechamente ligado a la productividad y competitividad de una empresa.
Reducción de riesgos
Sin duda, si promueves a un empleado cuyo desempeño y relación con la empresa conoces, estás evitando la incertidumbre que generan las nuevas contrataciones.
Al mismo tiempo, favoreces la reducción de la tasa de rotación y evitas el riesgo de fuga de talento que, si es alto, puede poner en peligro la continuidad de tu proyecto.
Desarrollo de carrera dentro de la empresa
Al promover el desarrollo de las carreras profesionales en la empresa, mejorarás la experiencia del empleado, uno de los grandes valores en la gestión de recursos humanos, ya que aumenta el compromiso y rendimiento de los equipos y reduce el absentismo.
Desventajas del reclutamiento interno
Depender exclusivamente del talento interno no es recomendable, ya que puede restringir la entrada de ideas frescas, innovadoras y disruptivas, que suelen provenir en gran medida de candidatos externos.
Asimismo, puede fomentar un clima excesivamente competitivo y generar resentimientos entre los empleados, especialmente si falta la transparencia necesaria.
Otro aspecto a considerar previamente es que una promoción interna genera una vacante en el puesto que deja la persona promovida, por lo que es esencial analizar las repercusiones de manera proactiva para calcular las implicaciones completas del proceso.

Reclutamiento interno vs. externo, ¿cuál es mejor?
En términos absolutos, ten en cuenta que no hay un tipo de reclutamiento mejor que otro, ya que en cada caso deberás evaluar diferentes factores como:
- Necesidad. Cuando hay una necesidad urgente de cubrir un puesto en una empresa, el reclutamiento interno es más eficiente, especialmente si se ha fomentado la polivalencia en la organización.
- Especialización. Si lo que necesita la organización son perfiles altamente cualificados para desempeñar roles estratégicos o de liderazgo, es común centrar el reclutamiento en la atracción de talento externo con experiencia.
- Productividad. Algunos estudios teóricos, como la Teoría del Dilema del Prisionero, muestran que reclutar exclusivamente de manera interna puede reducir la productividad de los empleados. Por otro lado, si tienen que enfrentar presiones externas, representadas en perfiles competitivos, esta aumentaría.
- Innovación. En entornos altamente competitivos, los perfiles externos, al introducir nuevas ideas y procedimientos, impulsan la creatividad de los equipos y los hacen más dinámicos.
- Inversión en formación. Las empresas con sólidos programas de capacitación y cualificación tienen un ‘talent pool’ o talento interno actualizado y de alta calidad.
¿Cómo desarrollar una estrategia de reclutamiento interno exitosa?
Si quieres potenciar el reclutamiento interno en tu organización, sé transparente, invierte en formación y desarrollo, busca el equilibrio con el reclutamiento externo y realiza evaluaciones de desempeño periódicas para detectar el potencial de tus empleados.
En resumen, fomenta una cultura de crecimiento y asegura que los procesos sean justos, transparentes y seguros.
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